viernes, 21 de agosto de 2009

Fraude & Marketing

Una ola de optimismo parece estar cruzando las coordenadas mundiales.
- Pronósticos de salida de la crisis anticipados,
- proyecciones de tasas de crecimiento y
- una profusa difusión de análisis prometiendo la vuelta de un mundo cuasi-idílico.


Lo cierto es que nadie se anima todavía a revelar cuál es la situación real de muchos de los bancos que quedaron en pie luego de la debacle financiera. Preguntas como
- ¿por qué ya no le quitan la asistencia financiera a los bancos si es que la situación está tan bien? o
- ¿hasta cuando los Estados tendrán que inyectar recursos monetarios al sistema financiero para neutralizar los efectos de los activos tóxicos?
- Todavía no tienen respuestas.

Una montaña de recursos financieros son aplicados a los sistemas monetarios sin medir las consecuencias de una posterior salida. Del "leverage" al "deleverage" todo en un solo paso y con una inundación monetaria.
- ¿Una suerte de "tsunami inflacionario" se avecina?
Pero el proceso no está completo. Aun no se sabe qué esconden los bancos. Dicho de otro modo:
- ¿Hasta dónde llega el iceberg bajo el agua?
Después de las pruebas de tensión, los grandes bancos tenían todavía un nivel de "leverage"

de 20 a 1. Pero,
- ¿qué calidad de activos hay fuera de los balances?
El Consejo de Normas Contables Financieras de Estados Unidos (FASB) ya les ha ordenado que reconozcan activos fuera del balance a partir del año próximo y los esquemas de valuación aún no está definidos.
La valuación a precio de mercado somete al capital de los bancos a una alta volatilidad y maquilla la calidad de los activos.
Por eso la salida de la crisis aún es una incógnita y el proceso de "deleveraging" encierra mucho peligro, en especial para los países con fuerte endeudamiento y con políticas fiscales débiles como el caso argentino.
Uno de los problemas más serios que enfrenta la Argentina ante este proceso es la retracción fuerte de los flujos de capitales. Cuando se desinflan o estallan las burbujas financieras, la reacción de los capitales apunta a
- los activos de menor riesgo,
- la inversión en activos de altísima calidad,
lo que deja fuera del mercado a países como la Argentina que
- está en default,
- con atrasos y
- sin perspectivas de inversión.
Frente al corte del flujo de capitales, la Argentina debe ir derecho a un ajuste de sus cuentas fiscales, para evitar que una nueva caída de los precios de exportación tenga un efecto perjudicial aun mayor.
La administración Kirchner, luego de enarbolar la bandera del fraude y querer instalarla en la sociedad como una norma de vida, se está topando con su propio fracaso.
- Esta conducta criminal, el fraude, es en rigor, un delito, es reiterada, y el gobierno la asimila como propia y la premia.
El daño al patrimonio de los acreedores, de los depositantes del corralito y corralón, de los ahorros provisionales, de las empresas confiscadas, de los contratantes, es premiado por el gobierno.

Como en el caso del fútbol, donde se premia el incumpliendo contractual con una recompensa multimillonaria, mientras se le quitan fondos a la educación, la seguridad, la salud, la defensa y a los jubilados se le dan migajas.
De allí que en un intento por oxigenar lo poco que queda en pie del modelo económico, el gobierno lanza un agresivo marketing queriendo mostrar que está dispuesto a ponerse en línea con la comunidad financiera.
Presenta el canje de deuda como algo positivo cuando este tipo de operación constituye la admisión de un nuevo default, de un nuevo fraude. No poder cancelar el "pagaré" prometido y cambiarlo por otro "pagaré".
De la misma manera, el gobierno busca una asistencia financiera del FMI pero sin someterse a las auditorías del organismo y apela a que le otorguen líneas de crédito sólo reservadas a países con fortaleza fiscal y que estén al día con sus acreedores, algo que la Argentina no cumple ni por asomo.

Algo ilusorio porque el FMI, por su estatuto, no puede prestar a países como la Argentina. Un marketing armado con el único objetivo de perder el tiempo.
El gobierno busca acceder a las denominadas Líneas de Crédito Flexible (FCL por su siglas en inglés), destinadas a atender necesidades de países que cuentan con sólidas políticas macroeconómicas y que sólo atraviesan una circunstancia de ahogo financiero derivada de la actual crisis de liquidez.
Esta FCL no tiene criterios de performance a ser revisados posteriormente ni tampoco cuenta con límites de monto, al tiempo que está destinada a la prevención de crisis para los países que el FMI considera bien administrados, "con fundamentos, políticas y una histórica puesta en práctica de estas políticas muy sólidas".
De esta manera, los países que accedan a esta FCL tendrán la ventaja de poder renovar el préstamo a los seis meses y extienden el plazo de repago de nueve meses a cinco años.
Además de las sólidas políticas macro, el comportamiento histórico de cumplimiento y el mantenimiento de esas políticas, podrán acceder a la FCL sólo los países que cuentan con "una posición externa sustentable, una posición de la cuenta capital dominada por los flujos privados, un registro histórico estable de acceso a los mercados de capitales para el financiamiento de la deuda soberana en términos favorables, una posición de reservas holgada cuando se solicite la FCL, sólidas políticas financieras, incluyendo una posición de deuda pública sustentable, inflación baja y estable basada en sólidas políticas monetarias y cambiarias, ausencia de problemas en el sector bancario que constituyan una amenaza para la estabilidad del sistema financiero y una efectiva supervisión y finalmente información sobre transparencia e integridad.
Para aquellos países que no alcancen el estándar de las FCL, tendrán disponible las tradicionales líneas Stand-by que obviamente están sometidas a la auditoría del FMI, algo que esta administración rehúye porque no las puede cumplir, lo que revela la debilidad de las cuentas públicas.
Cómo enseñaba Sófocles: "Vale más fracasar honradamente que triunfar debido a un fraude".

Miguel Ángel Rouco - "La Capital" - Mar del Plata - 21-Ago-2009

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