jueves, 14 de julio de 2011

El mal sueño de Europa

Tendremos que aprender a vivir con menos, pero Europa no puede abandonarse a la deriva.

En 1940, cuando los ejércitos de Hitler avanzaban sobre Francia, John F. Kennedy publicaba su tesis doctoral en Harvard bajo el título de "Por qué dormía Inglaterra".
El futuro presidente había vivido en Londres donde su padre, Joseph Kennedy, sirvió como embajador de Roosevelt desde 1938 a 1940 apoyando la política de "apaciguamiento" con Hitler del primer ministro Chamberlain que fracasó cuando Alemania invadió Polonia y Gran Bretaña declaró la guerra a Alemania.
El futuro presidente defiende la tesis políticamente incorrecta en aquellos fatídicos días diciendo que - el apaciguamiento, el appeasement, fue acertado porque

- un enfrentamiento prematuro con Hitler habría pillado a los británicos todavía menos
preparados para la guerra.
En todo caso, eran reflexiones de juventud del hijo del acaudalado embajador norteamericano en Londres.
- He relacionado aquel libro de Kennedy con el artículo del ex primer ministro Gordon Brown,

publicado ayer en varios diarios europeos, que lleva el título
- "¿Por qué se durmió Europa?"
El resumen de las tesis de Brown
, ahora víctima de los abusos periodísticos de Murdoch, es que
- Europa se reúne mañana, tarde y noche sin afrontar con rigor los tres problemas

básicos de la crisis:
- los déficits estatales,
- la inestabilidad bancaria y
- la falta de un proyecto para crecer económicamente.
Es bien sencilla y clara la explicación
que da el que fue más de diez años ministro de Economía con Tony Blair.
Hay que abandonar el pánico que se ha introducido en
- las gentes, en las instituciones, en los gobiernos, en los bancos y en el ambiente en general
y dejar de lamentarse.
- La crisis va para largo y
- no se aumentará sustancialmente el empleo en cuestión de meses.
Pero Europa no puede dormirse
- lamiendo sus heridas y
- profetizando amargamente sobre el futuro incierto que nos espera.
Pienso que
- se puede vivir con menos recursos y
- apretarse el cinturón para las estrecheces que puedan venir.
Hay que decir
en público y en privado que lo más perentorio es
- crear puestos de trabajo,
- recuperar el esfuerzo
y
- no caer en la fácil tentación de que la culpa de todo la tienen los demás,

- desde los políticos a los inmigrantes pasando por los banqueros.
Europa
- no puede quedarse dormida cuando
- la seguridad personal y colectivas está en peligro.
No me refiero naturalmente al fantasma de una guerra que no se divisa en ningún horizonte europeo.

Quiero señalar, sin embargo, que
- si el malestar social se extiende y
- llega a amplios sectores de la sociedad,
- se despertará el nacionalismo de los estados y
- podemos echar por la borda la realidad de Europa que
- tanto ha costado construir y que,seguramente,
- es la aportación más interesante y humanista que el Viejo Continente
- ha aportado al mundo en los últimos setenta años.
Lluis Foix - La Vanguardia - Barcelona - 14-Jul-2011

No hay comentarios: