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Los fallos de la estructura del euro estubieron ocultos por un periodo de auge económico en el sur.
La semana pasada, Mario Draghi, presidente del Banco Central Europeo, declaró que
- su institución “está preparada para hacer lo que haga falta
a fin de proteger el euro”; y
- los mercados lo celebraron.
En concreto,
- los tipos de interés de los bonos españoles cayeron en
picado y
- las Bolsas de todo el mundo subieron como la espuma.
Pero,
- ¿Se salvará realmente el euro?
- Eso sigue siendo muy cuestionable.
En primer lugar,
- la moneda única de Europa es una construcción con fallos
muy graves.
Y Draghi en realidad lo ha reconocido, algo que dice mucho en su favor.
- “El euro es como un abejorro”, ha declarado.
- “Este es un misterio de la naturaleza porque no debería
volar, pero lo hace.
- Y el euro era un abejorro que ha volado muy bien durante
varios años”.
- Pero ahora ha dejado de volar.
- ¿Qué se puede hacer? La respuesta, indicaba él, es
- “transformarlo en una abeja de verdad”.
Dejando a un lado el dudoso argumento biológico, entendemos lo que quiere decir.
A largo plazo,
- el euro solo será viable si
- la Unión Europea se convierte en
- algo mucho más parecido a un país unificado.
Fíjense, por ejemplo, en la comparación entre España y Florida. Ambos tuvieron enormes burbujas inmobiliarias que fueron seguidas de quiebras espectaculares.
Pero España está en crisis de un modo en el que no lo está Florida.
- ¿Por qué?
- Porque cuando la crisis los golpeó,
- Florida pudo contar con Washington para seguir pagando
la Seguridad Social y Medicare,
- para garantizar la solvencia de sus bancos,
- para ofrecer ayuda de emergencia a sus parados, etcétera.
- España no tenía una red de seguridad así y, a largo plazo,
eso tiene que arreglarse.
Pero la creación de
- unos Estados Unidos de Europa no llegará pronto, si es que
llega a ocurrir,
- mientras que la crisis del euro está teniendo lugar ahora.
- Por tanto, ¿cómo puede salvarse esta moneda?
Bueno,
- ¿Por qué fue el abejorro capaz de volar durante un
tiempo?
- ¿Por qué pareció funcionar el sistema del euro durante
sus ocho primeros años, más o menos?
- Porque los fallos de la estructura estaban ocultos por
- un periodo de auge económico en el sur de Europa.
La creación del euro convenció a los inversores de que
- era seguro prestar dinero a países como Grecia y España,
- que antes se consideraban un riesgo, por lo que
- el dinero fluyó hacia esos Estados, principalmente,
por cierto, para
- financiar los préstamos privados más que los públicos,
con la excepción de Grecia.
Y, durante algún tiempo, todo el mundo fue feliz.
En el sur de Europa,
- las descomunales burbujas inmobiliarias hicieron crecer
el empleo en la construcción,
- aun cuando el sector industrial se volvía cada vez menos
competitivo.
Mientras tanto,
- la economía alemana, que había estado languideciendo,
- se reanimó gracias al rápido aumento de las exportaciones
a estos países del sur que
- contaban con burbujas especulativas.
- Parecía que el euro estaba funcionando.
Entonces,
- las burbujas estallaron.
- Los empleos de la construcción se esfumaron y
- el paro aumentó vertiginosamente en el sur;
- ahora está bastante por encima del 20% tanto en España
como en Grecia.
Al mismo tiempo,
- los ingresos se hundieron; en su mayoría,
- los grandes déficit presupuestarios son una consecuencia,
- no una causa, de la crisis.
Sin embargo,
- los inversores se dieron a la fuga e
- hicieron subir los costes del préstamo.
En un intento por
- calmar los mercados financieros,
- los países afectados impusieron duras medidas de
austeridad que agravaron sus crisis.
- Y el euro en su conjunto parece peligrosamente débil.
- ¿Qué podría revertir esta delicada situación?
La respuesta está bastante clara; los responsables políticos tendrían que:
- (a) hacer algo para reducir los costes del préstamo en
Europa y
- (b) ofrecer a los deudores europeos
- el mismo tipo de oportunidad de escapar a sus problemas
- mediante la exportación que
- tuvo Alemania durante los años de la bonanza;
es decir,
- generar un auge económico en Alemania que
- imite el del sur de Europa entre 1999 y 2007.
Y sí, eso conllevaría
- una subida temporal de la inflación alemana.
El problema es que
- los responsables políticos europeos
- parecen reticentes a hacer (a) y
- absolutamente reacios a hacer (b).
En sus comentarios, Draghi —que sospecho que comprende todo esto— lanzó, en esencia,
- la idea de hacer que el banco central
- compre grandes cantidades de bonos del sur de Europa
para
- reducir los costes que conlleva la adquisición de préstamos.
Pero, al parecer, durante los dos días siguientes
- los funcionarios alemanes echaron un jarro de agua fría
sobre esa idea.
En principio,
- Draghi podría limitarse a rechazar las objeciones
alemanas, pero,
- ¿estará realmente dispuesto a hacerlo?
- Y las compras de bonos son la parte fácil.
- El euro no puede salvarse a menos que
- Alemania también esté dispuesta a aceptar
- una inflación considerablemente más alta durante
los próximos años,
y, hasta la fecha, no he visto ningún indicio de que los mandatarios alemanes estén dispuestos siquiera a debatir este asunto, no digamos ya a aceptar lo que sea necesario.
En lugar de eso, siguen insistiendo, a pesar de los sucesivos fracasos —
- ¿Se acuerdan de cuando se suponía que Irlanda iba
camino de una recuperación rápida?,
- en que todo irá bien si
- los deudores simplemente se atienen a sus programas
de austeridad.
Así que,
- ¿podrían salvar el euro?
- Sí, probablemente.
- ¿Deberían salvarlo?
- Sí, aun cuando ahora su creación parezca un tremendo
error.
Porque
- un fracaso del euro no solo causaría problemas económicos;
- sería un golpe descomunal para el proyecto europeo en
general,
- que ha traído la paz y la democracia
- a un continente con una historia trágica.
Pero,
- ¿lo salvarán realmente?
- A pesar de las muestras de determinación de Draghi,
- esto es, como he dicho, muy cuestionable.
Paul Kugman - El País - Madrid - 31-Jul-2012
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