- la infalibilidad de las predicciones visionarias y "religiosas" de los economistas,
- a los que dice que deberíamos dejar de creer y cuestionar más.
CON pequeños relatos y un discurso atrevido e irónico, pero en el que no propone alternativas, Baños analiza en su ensayo, calificado por él mismo de "libelo",
- el papel que ha jugado la economía en la vida de las personas en los últimos siglos e
- intenta "desmontarlo" y desvelar sus aspectos más absurdos.
- el papel que ha jugado la economía en la vida de las personas en los últimos siglos e
- intenta "desmontarlo" y desvelar sus aspectos más absurdos.
Baños considera que las leyes de la economía no existen, pues se tratan de
- "construcciones intelectuales aplicada políticamente que quiere reafirmar un sistema de dominación establecido", como
- el capitalismo actualmente o
- el sistema feudal en el pasado.
El periodista asegura que la actividad económica ha existido desde los inicios de la humanidad y lo sigue haciendo hasta el momento, y subraya que ésta puede funcionar "perfectamente" sin las leyes de la economía. Incluso va más allá y equipara la economía con la religión.
Para Baños,
- la economía es como un "juego de metáforas" que constituyen un relato y
- acaban formando una mitología
- que justifica el capitalismo mediante una "ficción legitimadora"
- que tiene, a su juicio, la misma función social y flexibilidad que la religión.
- "construcciones intelectuales aplicada políticamente que quiere reafirmar un sistema de dominación establecido", como
- el capitalismo actualmente o
- el sistema feudal en el pasado.
El periodista asegura que la actividad económica ha existido desde los inicios de la humanidad y lo sigue haciendo hasta el momento, y subraya que ésta puede funcionar "perfectamente" sin las leyes de la economía. Incluso va más allá y equipara la economía con la religión.
Para Baños,
- la economía es como un "juego de metáforas" que constituyen un relato y
- acaban formando una mitología
- que justifica el capitalismo mediante una "ficción legitimadora"
- que tiene, a su juicio, la misma función social y flexibilidad que la religión.
Actualmente vivimos, según Baños, en una "econocracia", una sociedad en la que gobiernan las leyes de la economía, estableciendo un símil con las teocracias, donde gobiernan los teólogos atendiendo a los mandatos religiosos.
Por ello, aboga por que la gente deje de creer y empiece a poner en cuestión a los economistas y espera que, del mismo modo que cayó la teocracia en el siglo XVII, lo haga la "econocracia" en menos de 200 años.
"Un deseo difícil de cumplir", admite. En este sentido, señala que le decepciona la "aceptación de las desgracias sin cuestionamiento", por lo que considera que la gente debería protestar y ser "más incrédula" con los economistas.
"Un deseo difícil de cumplir", admite. En este sentido, señala que le decepciona la "aceptación de las desgracias sin cuestionamiento", por lo que considera que la gente debería protestar y ser "más incrédula" con los economistas.
La casta de la econocracia que analiza Baños son los economistas, presentes en todos los sectores y que son, a su parecer, "los nuevos sacerdotes a los que ningún político se atreve a criticar".
El periodista apunta que del mismo modo que los sacerdotes utilizan unos símbolos de comunicación determinados y en su momento celebraban las misas en latín, los economistas usan un lenguaje "oscuro" para lograr ser menos entendidos por la gente.
El periodista apunta que del mismo modo que los sacerdotes utilizan unos símbolos de comunicación determinados y en su momento celebraban las misas en latín, los economistas usan un lenguaje "oscuro" para lograr ser menos entendidos por la gente.
Recuerda que la economía utilizaba hasta el siglo XVII un lenguaje filosófico que dio paso, hasta la actualidad, a otro más matemático que genera, según el autor, un "aura de poder" similar al lenguaje misterioso de las sectas.
En el ámbito político, el lenguaje utilizado en las explicaciones de la actual crisis es calificado de "brillante y eficaz" por Baños, pues "ha mantenido a toda la opinión pública callada". Como ejemplo, examina en el libro el lema "operación rescate", que, según dice, se ha tergiversado hasta el punto de que parezcan las mismas "zonas de conflicto" la crisis humanitaria de Darfur que la financiera en Wall Street.
"En Darfur llegan los helicópteros y lanzan vacunas, y en las Bolsas llegan los gobiernos e inyectan liquidez: así nadie se opone a los rescates", señala.
El capitalismo tampoco se escapa de las críticas feroces de Baños, que lo califica como
- un sistema "dinámico, sin frenos, sin límites ni moralidad" en el que no mandan los empresarios, sino el discurso de sus empresas.
"En Darfur llegan los helicópteros y lanzan vacunas, y en las Bolsas llegan los gobiernos e inyectan liquidez: así nadie se opone a los rescates", señala.
El capitalismo tampoco se escapa de las críticas feroces de Baños, que lo califica como
- un sistema "dinámico, sin frenos, sin límites ni moralidad" en el que no mandan los empresarios, sino el discurso de sus empresas.
Opinión - "DEIA" - Bilbao - 23-Ago-2009
2 comentarios:
¿Vivimos en una Econocracia?
Hay una encuesta y foro al respecto en:
http://www.burbuja.info/inmobiliaria/burbuja-inmobiliaria/215046-vivimos-en-una-econocracia.html
http://todoenduda.blogspot.com/2011/12/economia-y-mito.html
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